EL PÁPA DE TODOS LOS “CHACHOS”

Esta es la frase que pronuncio hace dos años mi sobrino Raúl y que recuerdo con muchísimo cariño ya que fue el primer viaje fuera de España (Roma)  que hice con tres de mis sobrinos (los mayores).

Él al igual que sus dos hermanas estudian en los “marianistas”, aunque la pequeña se enfada mucho cuando le dicen que ella es “marianista” ni corta ni perezosa y  muy enfadada como digo, responde, mientras me mira y dice soy Lucía ¿a qué si Tata? (esa soy yo).

Yo la sigo mirando, sería muy sería, aunque muerta de risa por dentro, le respondo claro que si,  eres Lucía la de la  canción que te canta papá, ella parece quedarse más tranquila y dándose la vuelta, busca la cabeza de alguna pin y pon que anda descabezada.

El Pápa de todos los “chachos”  y ahora le ha tocado a Francisco (Paco) , es el nombre del nuevo Pontífice que parece estar revolucionando a todo el mundo. Los más ateos se miran los unos a los otros diciendo, pero este hombre que cosas está diciendo, que ¡¡majete!!, y los católicos los de toda la vida también se miran, pero con una media sonrisa, sonrisa socarrona, porque saben que las cosas no van a cambiar demasiado, saben que sus propiedades, están a buen recaudo, saben que ellos continuaran sin pagar el IBI, seguirán sin pagar Impuestos de Sociedades ni Impuestos sobre Sucesiones ni Donaciones, que seguirán cobrando sus subvenciones para sus colegios (por cierto es un tema bueno a debatir) que sus párrocos también seguirán percibiendo sus salarios,  definitivamente la Iglesia no cambiará.

Veamos,  según Juan G. Bedoya periodista de EL PAIS dice que  “Bergoglio es un peronista” basándose en sus proclamas que recuerdan a Juan Domingo Perón, y que como él,  dice no ser ni de izquierdas ni de derechas, palabras demoledoras según el periodista pues hasta ahora la derecha católica había controlado el papado”.

En mi opinión y que afortunadamente coincide con algunos más, las declaraciones del Pontífice (para mi sobrino el Papa de todos los Chachos) son debidas a la labor de una Gran Campaña de Marketing, queriendo mostrar una Iglesia diferente, una Iglesia comprometida, una Iglesia moderna, pero insisto todo marketing,  la gente les está abandonando, saben que no convencen, y saben porque listos son como nadie, la necesidad de aire fresco que estamos necesitando, y hete aquí que  han encontrado a un verdadero líder el Papa Francisco.

La gente le escucha, ésta pendiente de lo que dice, lo vitorean, los creyentes y los no creyentes, sale en las noticias por sus declaraciones “tan escandalosas” pero como dije anteriormente, son solo eso palabras, solo palabras, para ser escuchadas por personas que necesitan escuchar, que necesitan saberse escuchadas, que necesitan saber que hay alguien “poderoso” que opina igual que él.

Palabras, repito solo palabras, no habrá ningún cambio en la Santa Madre  Iglesia, son demasiados siglos haciendo de su “capa un sayo”, son demasiados siglos manejando los hilos de la política y de lo demás también, son demasiados siglos siendo ellos mismos.

Pablo,  me reprochabas que criticaba a los que hacían algo por la pobreza infantil y que YO no daba muchas soluciones que digamos. Te dije una vez que nunca íbamos a estar en la misma lado de la mesa, a lo mejor enfrente, pero que al lado nunca y sigo diciendo lo mismo (siempre desde el respeto) pero no voy a caer en lo que siempre se dice en estos casos, que se vendan los grandes tesoros que tiene la iglesia (que por cierto en el Vaticano ya no están expuestos, ¿demasiados?). Sólo te diré que si la Iglesia pagase todos los impuestos como los pagamos religiosamente nosotros, a lo mejor, el tema de la pobreza infantil remitiría sustancialmente, estando segura que le llegaría a los más grandes también.

…Por sus obras los conoceréis”.