Cuando me paro a pensar en la
vida que llevan muchas de las personas a las quiero y admiro, francamente no me
dan envidia, aunque quieran enmascararlas de felicidad y buen estado,
no me dan envidia, en algunas tienen poder y estoy segura que llegarán
a tener mucho más (se lo merecen) y yo me alegro, pero no me dan envidia, en otros casos tienen familias compuestas
de hijos preciosos que crecen lozanos
como las lechugas, tienen una vida feliz¿?.... no me
dan envidia.
Pero yo me pregunto por qué sus
caras reflejan otra cosa, por qué sus ojos transmiten tristeza, vacío, aburrimiento,
y hasta en alguna ocasión abatimiento¿?
Me pregunto también por qué cuando alguien de su entorno hace algo
“fuera de lo normal” tratan de
ridiculizarlo, tratan de alguna manera de herirle con comentarios jocosos
(jejejejeje) de los cuales intuyes que quizá sólo quizá habla más la envidia que el conocimiento (cómo decía el otro….) .
Por mi parte he de decir, que yo
si que les admiro, que yo si que me alegro y me siento orgullosa de sus
triunfos, que yo si estoy con ellos, para lo bueno (las menos veces) y para lo
malo (en la mayoría de los casos). Repito los admiro porque son unos supervivientes natos, y los admiro porque aún viviendo
una vida infeliz son capaces de transmitir lo contrario, los admiro por su
capacidad de sacrificio, pero no me dan envidia.
Decirles de nuevo
que cuentan con todo mi cariño, apoyo y repito admiración!!!.
Y termino haciéndome una reflexión: Nadie lleva la vida que desea, todos desearíamos hacer distintas cosas, todos tenemos sueños, por qué no ayudarnos y apoyarnos¿?
Buena reflexión, "Chica de las fotocopias".
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